Partimos de un contexto de transición ecosocial, motivado por la necesidad de un cambio hacia un modelo más sostenible, justo y democrático. Este cambio de paradigma deja a la tecnología en un lugar secundario y pone de relieve la manera de relacionarnos con nuestro entorno.

Las comunidades energéticas juegan un papel clave en esta manera de relacionarnos y tienen como objetivo la transformación del modelo energético, a través del empoderamiento de la ciudadanía. Empoderamiento que toma forma en proyectos de participación, arraigados al territorio y con unos claros objetivos sociales y ambientales. En este sentido, queremos resaltar la idea de que la importancia de las comunidades energéticas va más allá de la generación de energía de origen renovable: estamos hablando de la democratización de la energía y el empoderamiento de la ciudadanía, hasta el punto en que las personas puedan, por fin, tomar partido en el mercado eléctrico.

Las comunidades energéticas han llegado de la mano de la Unión Europea y están en boca de todos. Son iniciativas ciudadanas para satisfacer y gestionar sus necesidades energéticas, sin perder de vista la convivencia con el entorno y las personas. Aunque esta gestión puede ser muy amplia y abarca muchos campos, actualmente la actividad se centra en la descentralización de la producción de energía mediante el autoconsumo fotovoltaico compartido.

Por otra parte, hay una apuesta política por las comunidades energéticas, pasando por la definición de las diversas tipologías, la creación de una nueva regulación específica y el fomento económico a diferentes niveles administrativos: desde el municipal al europeo.

En todo este proceso las entidades de la Economía Social y Solidaria (en adelante, ESS) tenemos mucho que decir y queremos tener nuestro espacio en nel mercado antes que lo coja el oligopolio. Nuestro objetivo es potenciar el tejido de la ESS y, a la vez, incidir sobre el modelo energético para fomentar una transición energética poniendo a la ciudadanía en el centro.

Las comunidades energéticas están al alza y el Modelo Abierto de Negocio para el Despliegue de Comunidades Energéticas, a través de cuatro fases de proyecto claramente diferenciadas, persigue el objetivo de proveer a las entidades de la ESS de una hoja de ruta consolidada para que puedan iniciar un modelo abierto de negocio de éxito basado en valores sociales y ambientales.

Ecoserveis lidera tanto el desarrollo del modelo de negocio, como su difusión, implementación y evaluación.

• Crear un plan de negocio abierto que promueva las instalaciones de autoconsumo en comunidades energéticas.
• Generar escenarios de colaboración entre entidades de ESS.
• Promover el autoconsumo des de les entidades de la Economía Social y Solidaria.
• Visibilizar la marca ESS centrándose en el valor añadido que le da a la ciudad.

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